viernes, 17 de junio de 2011 | By: Paco Lainez

La primera vez


Volviste con el Levante

un día al nacer el alba,

de pétalos cubriré

niña, tu desnudez malva.

 

Pétalos bajo tus pies

para recibirte amada,

recuerda mi corazón

tu sonrisa enamorada,

color de rubí el carmín

de tu boca deseada.


Soñé olor de jazmines

los paseos y las fuentes,

soñé aquellos jardines

y tus besos adolescentes.


Por el túnel de las rosas

paseamos enlazados,

besó tu boca mi boca

bajo el farol apagado,

dulce como la miel dulce

así sabían tus labios.


Recuerdo que fue esa noche

la primera vez que tuve

tus senos entre mis manos,

esa fue la primera noche

que los besaron mis labios.

 

Hubo otros abrazos, otros besos

pero lo que yo sentí esa noche,

jamás, jamás volví a sentir eso.

De mi libro: Poemas del Mentidero

3 comentarios:

Jana la de la niebla dijo...

Ojú, Salvochea, me vas sorprendiendo cada vez con poemas bellísimos. Primer amor, primera vez con alguien, siempre es tan diferente, luego pensamos: ¿dónde está aquel o aquella?; todo cambia aunque sea para bien, pero aquel primer beso siempre tiene un sabor único.
Besos.

Conchi dijo...

Hola Salvochea, en primer lugar agradecerte siempre tus comentarios en mi blog amigo, y respecto a éste poema, precioso, versos frescos llenos de ternura y amor limpio de un amor que siempre se lleva dentro, quizás el primero, recuerda a la adolescencia, a la candidez de ese primer encuentro. Letras con sabor a primavera, olor a jazmines y sabor a la dulce miel. Un abrazo desde el sur.

Duna dijo...

Es un placer leer tus versos. Buena entrada.
Un beso

Publicar un comentario